martes, abril 18, 2006

El engaño V

crónicas de la puesta de un cuerno…

Parte V
Síndrome de la amante

Como ya lo había dicho, esta parte es mi favorita, ya k tengo `mucha tela de donde cortar`, experiencias personales y experiencias por parte de mis amigas, el término de síndrome de la amante, lo invente (por así decirlo) después de k yo había pasado por un momento bastante difícil con respecto a ello (lo sé, tengo un problema de estar conceptualizando todo lo k me sucede, pero bueno…).

Básicamente durante 18 años de mi vida, la fidelidad era una parte esencial en una relación desde mi punto de vista, ya k era simple para mi “si ya no kieres estar conmigo por el simple hecho de estarlo, mejor vete”; de hecho, llego a tal grado ese concepto, k llegue al extremo de tener una relación larga, donde durante ella hubo total y absoluta fidelidad, y k el simple hecho de interesarse en otra persona, así sea mínimo, (ya k así se lo pedí a él), era causa necesaria para separarnos. Hace un año k ya no estoy con él, y creánme en un año, mi visión cambio muchísimo.

En una relación donde existió el engaño, a kien se juzga más, no es al novio, es a la amante; ella es –la otra-, ella es la zorra, ella es la perdida, la k no respeta, de la solo desean su cuerpo, la malvada, la descarada, la señalada y la juzgada, la k merece el peor de los castigos. La k no tiene sentimientos… y precisamente de ellos es de los k kisiera hablar.

Sé, y perfectamente, k se puede actuar con alevosía y ventaja importándote un bledo la novia y siguiendo únicamente un objetivo, sea cual sea éste, pero también sé, k muchas veces no sucede eso, y más muchas otras ocasiones nisikiera sabías k estabas siendo la amante.

Siendo la amante se juega en dos extremos donde el límite entre ellos es muy fino y cualkier momento puedes acabar en donde no kerias estar, con o sin sentimientos; cuando pasas de sentimientos a sin sentimientos, es triste, por todo lo k tu amor hacia esa persona haya significado, pero inevitablemente vives más estable. Con sentimientos es el peor lado, ya sea k tus sentimientos se hayan presentado antes o después de la relación, pero cuando llegan, todo rastro de felicidad tiende a desaparecer, y solo kedan pequeños residuos de los cuales kisieras aferrarte, pero entre más los tocas más te lastimas, te hieren, y te llevan a la más profunda tristeza.

Tristeza, pork lo kieres, y kisieras lo mejor para él, y es ahí cuando aparece la culpa, esa voz k te dice todo lo k ya sabes, pero k no kieres escuchar, pork recuerdas k siempre te han dicho k eso esta mal, k no debe de ser, la misma culpa hace k te sientas la peor persona sobre la tierra y te preguntas “¿como es posible k haya llegado a esto?”, te sientes en total desventaja, “por lo menos ella lo tiene a él, yo no tengo nada”, o al menos eso es lo k crees.

Te prometes k no volverá a suceder, pero si eres débil, él llegara y una vez más caerás, es mentirte por un momento, es no kerer saber nada del exterior, él esta hora contigo, y eso es lo k importa, así sean tan solo algunos minutos…. No importa en ese momento.

Recuerdan cuando dije “k pasa si en realidad están enamorados de la segunda persona, pero k sienten cierta responsabilidad con la primera”, ah.. pues eso es lo k tu piensas, y obviamente eso es lo k él te dirá. Y es ahí cuando entras de nuevo a ese círculo vicioso; ese es el síndrome de la amante “esta con ella, pero él dice k a la k kiere es a mi”, y tienes k estar o muy decidida o de plano muy mal anímicamente para poder salir de ello, kitarte de la mente esa frase y aceptar las cosas tal y como son.

Alguna vez me dedicaron una frase k decía “... de nada valen las palabras si no lo demuestra...” y si, tiene muchísima razón, y especialmente cuando tu estas metiendo sentimientos de por medio.

Las ocasiones k han confiado en mi, y confesado k se encuentran en una situación así, inevitablemente no puedo aconsejarles más k lo único k yo creo, y k sé no es totalmente lo k algunas personas dirían “lo correcto”: --tú eres libre de hacer lo k tu kieras, siempre y cuando no te estés lastimando a ti misma, nadie tiene pork juzgarte, y si tu eres feliz haciendo lo k haces, no tiene pork importarte lo k digan los demás, si sufres por ello es pork en realidad no eres feliz así. Y ten en cuenta algo, tu no eres la k peor se encuentra, creeme, tú sabes donde estas, sabes exactamente en k posición te encuentras, pero ella, ella nisiquiera sabe k tú existes; tú sabes k muy probablemente saldrás lastimada, pero ella cree k su relación es totalmente estable, tú sabes kien es él y hasta donde puede llegar, ella no y eso es peor, pork no sabe todo lo k él le puede ocultar—

Y podría seguir y seguir escribiendo, pero sinceramente ya me cansé, creo k esta ocasión acabo siendo un escrito demasiado largo……….