jueves, junio 23, 2005

La Historia De Una Vida " El Gran Abismo"


“Universidad”

“En la vida estudiantil casi siempre había sido excelente y este era el preciso momento donde se vería el fruto de mi trabajo, siempre tuve la mentalidad de ser alguien importante, de destacar, de lograr lo q me proponía sin importar cuanto tuviera q esforzarme o lo q hubiera q sacrificar xq al final valdría la pena”.

“Pero la vida no siempre es logro, tras logro ó éxito rotundo asegurado y mi ingreso a la Facmed me dio los primeros grandes y duros golpes q me harían valorar la gran satisfacción de llegar a la cima”.


Una nueva etapa comenzaba y aquello por lo q tanto luché en la prepa lo había logrado. Mi ingreso a mi nueva facultad fue un logro q en verdad me emociono mucho, me sentí privilegiada por la forma en la q recibí la noticia ya q me llamaron de parte de la dirección de la Fac dos días antes de q toda mi generación se enterara d q carrera se les había asignado, esta llamada tenía por objetivo informarme q tenía q presentarme al Palacio De Medicina donde me darían instrucciones precisas del proceso de inscripción además de la indudable bienvenida.

El gran abismo

El primer día de clases había llegado, (wow!!! yo en este nivel “simplemente increíble”) y con ello otro gran reto a superar, tenía muchas metas, muchos proyectos, muchas esperanzas muchas ganas de salir adelante, pero otro evento cambiaría el rumbo de mi vida al curso menos esperado.

Una mañana como cualquier otra iba manejando tranquilamente de camino a mi facu, al entrar al circuito una Explorer q se iba aproximando a esta entrada se me cerró, de la inexperiencia y el susto, creo q di un acelerón y giré el volante a la derecha, pero al ver q me había subido a la banqueta volví a girar el volante pero ahora a la izquierda, acción q me llevaría a impactarme con el muro deflector en el extremo derecho del frente de mi automóvil, seguido de esto comencé a trompear al grado q casi me volteo xq claramente vi el suelo, pero un segundo impacto en la parte trasera del carro me dio estabilidad lo q a su vez me proyecto fuera del circuito quedando todo mi auto destrozado.

La fuerza centrifuga q sentí en ese instante fue aterradora, era como tener un muñeco dentro de un carrito de juguete y empezar a jalonearlo, solo imaginen lo q le pasa al muñeco al hacer esto y crean me q este experimento es algo análogo a lo q me paso a mi dentro del auto. Las personas q observaron de fuera todo el momento del siniestro quedaron atónitas al verme bajar del auto ya q pensaron q debido a la magnitud del choque estaría muerta y más fue su sorpresa cuando me vieron ilesa, y caminando!!!! Solo tenía un poco de sangre en la boca y unos cuantos moretones en el cuerpo, el más impactante fue uno hecho de entre mis senos (principalmente el derecho) a la cadera derecha, y este fue causado por el cinturón de seguridad, solo sé q gracias este a mi no me paso más, de lo contrario de no haberlo usado lo más seguro es q si hubiera fallecido en aquel instante.

Lo q yo pensé al bajar del carro fue "mi padre me va a matar", había destrozado su auto más nuevo y lo peor del caso es q no tenía seguro y aún no lo terminaba de pagar, cuando llamé a casa mi papá se sobre salto al escuchar mi voz puesto q tenía como 10 min de haber salido, le dije lo q había ocurrido y le di la ubicación exacta. Cuando papá llegó y vio su auto casi me pega, pero se detuvo por q una voz q provenía talvez del paramédico o de algún espectador le gritó “Señor de gracias de q su hija este viva y de q el golpe solo recayó en lo material”

Al escuchar esto yo caí en llanto pues de verdad no me había caído el veinte de q pude haber muerto, mi madre me abrazó muy fuertemente tratando de consolarme, mientras mi padre se hacia cargo de todos los trámites legales.

Una vez q llegó la grúa regresamos a casa, de donde partimos al hospital para q me revisaran de todo a todo y para checar q no tuviera algún daño interno o cualquier otra cosa q pudiera afectar mi estado de salud, recuerdo q saliendo de la sala de radiología y entrando de nuevo a la sala de urgencias, vi a mi tío favorito increíblemente angustiado y desesperado, trataba de pedir informes sobre mi estado a las enfermeras q se encontraban cerca de él, ya q como primero vio como había quedado el carro, esperaba verme a mi destrozada, al encontrarme las lagrimas brotaron de sus ojos pronunciando “doy gracias al cielo q t encuentras bien” al terminar de escuchar esto yo caí de nuevo en shock y definitivamente no paré de llorar durante casi todo el día.

Después de esto fue difícil levantarme ya q cada vez fui cayendo más profundo en el abismo hasta q toque fondo. Y donde más lo proyecte era el lugar donde menos tenia q manifestarlo. Fue entonces cuando mi suerte en la escuela ya no fue la misma a mis acostumbrados triunfos.

No entiendo donde fue quedando todo el entusiasmo, todas mis metas, todas mis ilusiones, este periodo sin duda fue simplemente terrible, mis acostumbradas calificaciones comenzaron a bajar, mi autoestima dio un gran bajón y con esto el desinterés y la apatía tocaron a mi puerta.

Fueron días de intensas confusiones, no quería salir de mi casa tras el pánico q empecé a presentar x el simple hecho de salir a la calle,
de tener q manejar o tomar algún tipo de transporte público, solo quería esconderme tras la puerta de mi habitación, echarme a llorar y no saber nada sobre mí persona, mi vida y mí carrera hasta q llego un determinado momento en q se volvió una realidad.

Comencé a deprimirme hasta por el simple hecho de q amanecía, empecé a dejar de comer, reír, salir, soñar, amar, etc. Deje de tener ganas incluso de hablar con mi familia, definitivamente no quería saber nada del mundo y termine dándome de baja en la Fac; he de admitir q fueron los meses más terribles de mi vida.

El tratamiento a mi nueva patología fue muy duro, los antidepresivos eran cada vez más fuertes en mis dosis recomendadas y yo deje de hacer mucho x tratar de salir adelante, ya q no concebía el hecho de no haber muerto en aquel instante, durante todo este tiempo de encierro el deseo de estar muerta me paso más de mil veces por la cabeza, muchas veces me pregunte ¿q hice para merecer seguir viviendo? ¿xq no me paso casi nada? ¿q es lo q me falta por hacer q ese no era mi momento para dejar de existir? La interrogante más grande siempre fue un ¿xq?.

Un ángel caído del cielo

Mis padres trataron de llevar la vida familiar con normalidad así q los meses transcurrieron y el primer cumpleaños q se aproximaba después de mi accidente era el de mi hermano, tratando de escapar un poco de la realidad q estaban viviendo conmigo, hicieron una fiesta de cumpleaños para mi hermano.

Los ánimos en mí seguían por los suelos y de verdad no tenía muchas ganas de bañarme o de hacer algo bueno por mi y así q ese día como de costumbre no lo hice, me quede como siempre en pijama, pero lo único en lo q si obedecí a mi madre ese día fue en q tenía q bajar a saludar a mis familiares y aún q yo no quisiera lo tenía q cumplir.

En uno de los timbrazos q anunciaban la llegada de los invitados, mi mamá me mando a abrir la puerta y fue cuando algo muy inusual estaba apunto de ocurrir, nunca imagine q mi primo al cual no dirigía palabra alguna desde el 1° grado de secu era quien tocaba a mi puerta acompañado de “Oliver” su mejor amigo.

Lo primero q hizo mi primo al verme fue reírse diciendo “q te paras y q te peinas verdad” a lo q Oliver como todo buen pandroso contestó “bueno tu déjala, si ella es feliz estando en pijama en medio d una fiesta tu no tienes xq molestarla” “Además no se ve tan mal”, lo cual provoco en mi la gran sonrisa q hacia mucho tiempo mi rostro no era capaz de dibujar, aparte la verdad si me apene muchísimo ya q alguien ajeno a mi familia había arribado a mi hogar y entonces ya no había la misma confianza como para seguir en pijama!!!!

Pensé en ir a bañarme y ponerme decente para la ocasión pero la verdad estaba muy a gusto con mi atuendo y con la pena así me quede, todo siguió un trascurso normal, hasta la hora del pastel q fue cuando “Oliver” con una plática muy extraña comenzó a llamar mi atención y cada frase q decía era motivo de risa cosa q me contagio, seguido a eso mi primo me dijo q una de nuestras primas iba a celebrar ese mismo día su cumple en un bar de Cd. Satélite (algo q yo ya sabía xq a mi me invito por mail) así q me invito, y mi respuesta fue un grandioso NO, pero Oliver empezó con la labor de convencimiento y tras un rato de intentos lo logró, pedimos permiso a mis padres y tras aceptar ellos, se me hizo el baño q desde días antes ya me urgía.


“Oliver”

“Esa noche en el bar me la pase súper bien acababa de conocer al chico q me ayudaría a salir por lo menos de la depre cuando más lo necesitaba y precisamente este día daría comienzo a una de las mejores amistades q he tenido en la vida.”

Esta era la primera vez q yo salía de noche a un bar y la verdad para ser la primera experiencia de este tipo me la pasé “genial”. Al principio me aleje un poco de mi primo y de Oliver ya q conocía a algunos de los amigos de mi prima y como les había caído muy bien desde el principio comenzaron a platicar conmigo como si fuéramos súper amigos de muchos años.

Al avanzar la noche regrese a platicar con mi primo y Oliver pero la banda de rock q ese día se estaba presentando era muy buena y todas las canciones q tocaban incitaban irresistiblemente a cantar, brincar y bailar al ritmo de la música y más ya con unos buenos alcoholes encima la situación se estaba poniendo de verdad muy buena.

Tras estar cantando y bailando un rato poco a poco Oliver se empezó a acercar a mí y cuando menos imagine, me robo un beso q wow!!!!, fue todo un microorgásmo jamás me habían besado de esa forma, tan llena de ternura, pasión, deseo, todo en un simple y sencillo beso.

Pronto llego el tiempo de regresar a casa, pero como Oliver y mi primo vivían bastante lejos se quedaron a dormir en mi casa. A la mañana siguiente no sabía ni q onda, me sentía tan extraña, no podía mirarlo ni a los ojos, el desayuno fue bastante bochornoso ya q mientras todos desayunábamos, mi mamá contaba anécdotas de cuando eramos niños, mientras Oliver y yo traíamos un juego de miradas de esas q cuando nos pillababos mirandonos el uno al otro el rubor y la sonrisa en nuestras caras era más q un indicativo de q algo habría de ocurrir entre nosotros.

La primera cita fue a los tres días de conocernos y fue algo extraño xq ala vez tenía miedo de q fuera algo fugaz o de q no me tomara enserio, ya q como se dieron las cosas esa no era la forma más correcta de conocer a una persona, pero tenía un cierto misterio q me empujaba a darme la oportunidad de conocerlo además no tenia nada q perder. Su plática era tan interesante, me encontré con un niño q dedicaba la mayoría de su tiempo a la cultura, a leer, aprender, conocer nuevas cosas, además era tan sencillo q de pronto no había en el ningún rastro de superficialidad lo cual me encanto desde el principio.

A medida q lo fui conociendo tuve la gran experiencia de ampliar mi horizonte en muchas áreas en las cuales yo estaba totalmente cerrada, el fue una puerta hacia la literatura y a la cultura q de verdad le agradezco a la vida el darme la oportunidad de abrirla, en el tiempo q conviví con él jamás tuve tiempo de aburrirme siempre había algo nuevo q hacer, algo nuevo q decir, algo nuevo q vivir, incluso como novio tuve mucho q aprender de él.

Pero no todo es para siempre y un día después de 4 meses así como empezó término, realmente con el no termine mal, al contrario siempre ha sido un gran amigo con el q he podido contar, pero el motivo real de nuestra separación fue q cada quien empezó a tomar caminos cada vez más distantes, yo retome la medicina y el siguió su camino hacia el conocimiento por el lado de la filosofía y la psicología.