lunes, junio 20, 2005

La Historia De Una Vida "Prepa: Victorias y Fracasos"


La meseta y el fracaso de nuestra relación

“Es difícil hablar de esto aún q es solo ya parte de un recuerdo, el simple hecho de narrarlo produce en mí todos esos sentimientos encontrados q en aquel tiempo viví, esos sentimientos q van desde las sonrisas de oreja a oreja q se dibujaban en mi rostro cuando algo agradable ocurría, hasta las amargas y hondas lagrimas q lloraba cuando algo me lastimaba”. “Hubiera deseado el tener en ese tiempo la fuerza y el coraje suficiente para poder decirle lo q no me gustaba, lo q me hacia daño, q necesitaba mucho hablar claro y ser directa para solucionar los problemas q me estaban afectando”. “Tenía miedo a decirlo y perderlo, a veces el miedo es nuestro mayor enemigo cuando eres tú quien quiere más en la relación, te hace tan débil q inconscientemente comienzas a dejar pasar por alto situaciones q sin duda alguna producirán efectos negativos durante el transcurso del noviazgo”.
Las cosas entre notros fueron cada vez más en decadencia, cada quien en su nueva escuela conoció personas diferentes y nuestras historias se volvieron cada vez más distantes; intereses, pasatiempos, cosas en común cambiaron radicalmente en aproximadamente año y medio.

El tiempo transcurrido para volver a vernos a veces era de una a dos veces a la semana hasta q poco a poco empezamos a vernos una vez al mes. Lo cual de pronto no me incomodaba mucho ya q siempre había tratado de ser independiente y no proyectar mi inseguridad ante la hostilidad ahora presente y hasta cierto punto consideraba q era bueno q ambos tuviéramos nuestro espacio para no fastidiarnos el uno del otro muy rápido (aún q si es muy cierto q antes estábamos juntos la mayor parte del tiempo, ese fue un gran cambio q tuve q permitir), pero se siente cuando las cosas ya no están funcionado tan bien como antes, se presiente q algo anda mal.

Nuestras citas fueron cada vez mas frustrantes, hablábamos muy poco de nosotros, de lo q nos pasaba en nuestra vida cotidiana, los silencios eran aterradores, y lo único q hacia aparentemente aceptable nuestra relación era q ambos seguíamos sintiendo a la hora de besarnos esa sensación de cosquilleo q te va recorriendo poco a poco por el cuerpo.

Casi para mediados de nuestra estancia en la prepa el fin entre nosotros era cada vez más evidente, hasta q aquel desventurado instante hizo acto de presencia terminando amargamente con lo único en lo q había venido soñando desde los 12 años.

“Si el no era para mi yo no tenía xq retenerlo, así comprendí q tenía q dejarlo ser feliz, teniendo por opción el ser fuerte, levantarme y seguir adelante”. “Recuerdo q le llore incansablemente y en silencio durante muchas noches, hasta q el dolor desapareció”.

Los años en la prepa

La prepa... ¿Quién no va a recordar sus vivencias en ella?, he llegado a pensar q si bien es cierto q es cuando adquieres mayores libertades y la diversión esta en su máximo apogeo, tambien es cuando los sentimientos se vuelven más vanos, egocentristas y superficiales; posición un tanto estúpida no?

La escuela se vuelve una pasarela de modas, en donde los más populares siempre llaman la atención con el estilo q le imponen a sus atuendos, ó simplemente el ser bastante relajado y desmadroso te lleva a la cima del éxito en la vida social.

En este punto a mí no se q me paso, pase de ser la niña más desconocida e ignorada en la secu a una niña q no pasaba por un pasillo de su nueva escuela sin ser saludada por alguien, raro no? Puesto q siempre fui muy “x” en mi estilo, la verdad me desate muchísimo pero siempre procuré nunca exceder mis limites ya q los tenía bien definidos, además de q siempre tuve muy en cuenta cual era mi meta.

Aún q comencé a tener una gran fila de pretendientes me di la tarea de dar el open a todos y cada uno de ellos (jajajaja no por mala onda pero no tenía muchas ganas de conocer a nadie) con una serie de barbaridades q en el momento se me ocurrían y júrenlo q nunca se me volvían a acercar (al menos en plan de ligue), así fue como poco a poco aprendí a identificar patanes o eso quise creer en ese momento.

En mi grupo de 3° y 4° había un niño q siempre me había llamado la atención pero realmente no me importaba hacer algo para conocerlo, es más aun q a veces se sentaba junto a mí nunca le hable. Para finales de 4° y principios de 5° semestre me sobrepuse de lo de YARP (aparentemente) y fue entonces cuando decidí q ya era tiempo de levantar la mirada y seguir adelante.

Hasta este momento no le había permitido a nadie conocerme de otra forma q no fuera la de una simple amiga y agradezco q “Diego” (el niño de mi grupo en 3° y 4°) no intentara hablarme antes por q le hubiera tocado open seguro. Fue hasta finales de 5° cuando por medio d su amigo con quien yo compartía una clase nos presento “por así decirlo” (xq de vista era seguro q nos cocíamos) y entonces fue cuando nos empezamos a hablar.

La historia de Diego no fue de mucha trascendencia pero no por esto dejo de ser divertida, este niño la verdad lo tenía todo, era el clásico niño q por su linda cara y sus dotes de “Don Juan” era muy difícil q una niña lo bateara. Su forma de elegir a sus novias tristemente se basaba en lo físico y superficial y digo "tristemente" por q me toco ser elegida de esta forma.

No todo lo q brilla es oro

“Afortunadamente mis pies nunca se despegaron de la tierra ante el nuevo posible romance, mi intuición me decía q algo no andaba bien, q tenía q irme con mucho cuidado y q no debía confiar mucho en él.”

En una de nuestras salidas en grupo a una tardeada me llegó, se había portado tan lindo en los últimos días q precisamente esos detalles me hicieron bajar la guardia y caer en la trampa así q acepté.

Mi segundo romance no era todo de color de rosa ya q por lo mismo de sus antecedentes de “Don Juan” era muy difícil q yo pudiera confiar en él y expresarme libremente, me volví muy retraída, no sé alo mejor por temor a ser una aventurilla más en su lista y no trascender en su vida e inconscientemente le complique las cosas.

Era evidente q este niño ya estaba súper experimentado y muy probablemente, si no es q era casi seguro buscaba lo q todo hombre busca a esa edad, y bueno yo no me deje. Creo q le saque un millón de canas verdes ya q a veces sí notaba su enojo ante la escasa posibilidad de avance, y por mucho solo le permitía tomarme de la mano ( jajajajaja yo y mis ocurrencias no?) pero es q de verdad no quería volver a llorar y menos por algo a lo q empezaba a darme cuenta q no tenía mucho sentido.

Toda estrategia q intentaba era sin duda un intento fallido y el más grande de ellos (y la verdad creo q fue el más divertido y por lo tanto el último [obviamente lo veo así ahora q han pasado los años]) fue cuando un día me llamó a casa como a eso de las 6 de la tarde xq me tenía una sorpresa y solo hablo para avisarme q venía en camino, de pronto la idea me emociono, me dejo súper intrigada pensando en ¿cuál sería esa sorpresa?.

Ese día en mi casa para su mala suerte estaba toda mi familia presente, desde el más pequeño hasta el más anciano ya q celebrábamos el cumpleaños de mi abuelo materno, mis tías abuelas (q desde q tengo uso de razón siempre fueron todo un desmother, eran capaces de hacer ver con gracia y en doble sentido todo lo q se decía en las pláticas), empezaron a decirle a mi papá “q ya olía a suegro y q se cuidará xq q tal q se repetía conmigo la historia” (mis papás se casaron a los 17 años y en eso entonces “yo tenía 17 años” ¿curiosa coincidencia no?), yo creo q en eso mi papá comenzó a echar marcha atrás su película y recordó todo lo q a sus joviales 17 años hizo e imagínense nada más lo q paso.

Al llegar Diego (yo creo q llegó como a eso de las 8 PM), lo pase tranquilamente a mi casa sin meditar mucho lo q segundos antes había acontecido y lo presente (ERROR!!!!!!!!), mi papá lo observaba sigilosamente de pies a cabeza sin decir nada, no apartaba la vista de nosotros ni un segundo, lo cuál me puso en exceso nerviosa ya q fue entonces cuando me di perfectamente cuenta de lo q estaba pasando.

Habremos estado platicando Diego y yo por alrededor de una hora (mi papá detrás de él no paraba de hacerme señas de: ya es tarde mira el reloj, ya córtalo y mándalo para su casa, ya me quiero dormir ¿q estas esperando?, etc.) y fue cuando se le ocurrió la grandiosa idea de decirme su fabulosa sorpresa (hay dios hubiera sido preferible q nunca lo hubiera hecho) esa era precisamente “salir al cine” (muy inocente ¿no?) y a mi lo más tarde q me permitían llegar era por mucho a las diez, por esto mismo se me ocurrió decirle desafiantemente “pregúntale a mi papá” (no, no, no, súper ERROR!!!!!) mi idea fue q como se había dado cuenta de q traía carro, el transporte ya no sería problema y tal vez superado el primer obstáculo q seguramente me iba a poner entonces podría existir una posibilidad de q me diera permiso de salir (ya q siempre procuraba consentirme en lo q le pidiera [q ilusa!!!]), la verdad de principio no creí q lo hiciera pero q creen…. Sí lo HIZO!!!!!

NO, NO, NO, mi papá se puso como nunca antes en mi vida lo había visto, comenzó a hacer un interrogatorio q ni el más maldito policía le hace al peor delincuente y termino por decirle: ya viste la hora q es????, a lo que Diego contestó: “Si”, y así pretendes salir a esta hora con mi hija????, “si señor no tiene nada de malo”, palabras q enfurecieron tremendamente a mi señor padre y le respondió con otra pregunta: ¿Mejor invítame a mi al cine Teresa a la función de media noche no? seguido de esto lo siguiente q pronuncio fue: Mira muchacho si quieres ser novio de mi hija primero tienes q pedirme permiso a mi (aaaaahhhhhhh!!!!!! No podía creer lo q había escuchado), las ganas de salir corriendo me invadieron y yo creo q a Diego tambien ya q no pasaron más de 10 segundos cuando ya estaba afuera evitando toda posibilidad d q mi papá siguiera hablando.

Unas vez q se había marchado mi papá se fue a dormir sin decirme nada, pero al día siguiente me puso y una regañada q en mi vida habría de olvidar, me dijo q esa era la clase de muchachos q yo debía evitar, por mi parte yo estaba furiosa, como se había atrevido a hacer eso así q le deje de hablar casi como un mes hasta q se me paso el enojo.

Diego por su lado al lunes siguiente no se acerco a mi ni de broma y comprendí perfectamente q todo había terminado y lo q más coraje me dio fue q no tardo un miserable día en tener otra novia (maldito patán!!!!) así que me arme de valor y no permití de ninguna manera q me afectara (aún q la verdad si me dolió) y trate de no perder el equilibrio y salir adelante ya q el final de la prepa estaba cada vez más cerca y para la meta q me había fijado por lo menos en la escuela no debía bajar la guardia.

Pronto paso el semestre q me faltaba por cursar y así “conquiste satisfactoriamente otro escalón más en mi ardua, difícil e inesperada escalada hacia el éxito”.